domingo, 21 de mayo de 2017

¿Qué significa ser profesional?


Actualmente, el ser humano se ve enfrentado a diferentes perspectivas de su entorno y solo su formación desde la niñez lo llevara a decidir que esta bien y que no, lo anterior permite forjar el carácter de un individuo, llevándolo a un estatus de madurez ética y moral. Cuando se hace referencia al profesional, se dirige la atención hacia aquellas personas que se están ejerciendo en el mundo laboral, sin embargo, y desde nuestro punto de vista, esto no solo se encuentra ligado a dicho suceso, de igual forma se abarcan las actitudes de las personas en su diario vivir, involucrando a todos aquellos que forman parte del circulo social. Ser profesional conlleva un significado mayor al que se le esta dando y, ciertamente, tener un titulo no te define como persona, pero identificar lo que es correcto y lo que no, saber elegir entre una opción viable o no, esa es la verdadera condición de ser profesional, anteponiendo en todo momento los valores que han llevado al desarrollo del mundo entero.

El profesional debe contar con principios éticos que lo lleven a ser una persona ejemplar y que se encargue de mejorar las condiciones de su entorno para un bien común.

Puede decirse que desde la minoría de edad todos debemos seguir las ordenes de los mayores, pero a una edad adulta somos capaces de tomar decisiones autónomamente, basando estas en los principios éticos adquiridos en nuestros inicios y que nos conduzcan a una vida moral que alcance todos los aspectos en la vida del ser humano, ya sea a nivel personal o profesional. Ser profesional no solo se refiere a conocimientos científicos de un tema, sino a la forma en como se aplican dichos conocimientos, ya sean de forma consciente para el bienestar propio y el de los demás, contribuyendo a nuestro futuro y al avance social.

La imagen es un ejemplo claro de los dilemas que enfrentan los profesionales en la actualidad.

En el presente, el profesional puede ser capaz de alcanzar tantos logros en todos los ámbitos de su vida, pero estará en su personalidad determinar si la forma para llegar a ellos es conveniente o no. Nos enfrentamos entonces a diferentes limitaciones que pueden tropezar con nuestra moral y es en este punto cuando estará a prueba nuestra capacidad de responder concretamente y procurar actuar correctamente, aun cuando aquello dé pie para generar rencillas con otras personas o, incluso, la perdida definitiva de un trabajo. Lo anterior generara retos a los cuales debemos estar preparados en todo momento, pidiendo ante todo la guía de Dios para sobrellevar hechos de verdadera corrupción y que necesitan ser solucionados para evitar peores consecuencias.

De igual forma, el profesional sera capaz de relacionarse con todas las personas a su alrededor, su trato sera el adecuado para ganarse el respeto y la confianza de estas, además de crear lazos de amistad que posibiliten una labor mas cómoda para todos. Como estudiantes en formación, somos libres de elegir en cualquier momento y sabemos que se presentaran situaciones de verdadera tensión, pero es hay cuando mas se deben afianzar los principios aprendidos desde nuestra niñez, durante el colegio y, aun, en la universidad, sin olvidar que deben superponerse los valores morales, garantizando el bien de las personas involucradas.

EL PROFESIONAL NO ES SOLO AQUEL QUE TRABAJA, ES EL QUE SABE ELEGIR Y ACTUAR.

sábado, 20 de mayo de 2017

La madurez ética y moral del hombre


La madurez nos permite decidir entre lo que es bueno y lo que no, para nosotros y los que nos rodean.

Normalmente, ligamos la madurez de una persona a su edad y decimos que dicho estado se ha alcanzado cuando esta ha cumplido sus 18 años de vida, sin embargo, la madurez abarca otros términos de mayor significado que distinguen a todo ser humano. En algunos casos, cuando se ha alcanzado dicha edad, el hombre puede decidir que hacer con su vida sin depender de sus padres o dejarse llevar por la comodidad que siempre ha tenido, evitando salir de esta para no preocuparse por nada ni nadie. Por lo anterior, cuando se hace referencia a la madurez ética y moral del hombre, se habla de las acciones que este demuestra de forma permanente, sus palabras, sus actitudes, su manera de tratar al prójimo, todo reunido para definirlo delante de la sociedad.

La madurez consiste en pensar en tu bienestar y el de los demás.

Dicha madurez es de carácter ético y moral, formada desde la educación recibida en casa, escuela, incluso en las calles, llevando a una persona a decidir como debe actuar, según sea el contexto, y de que manera se desempeñara continuamente en la sociedad. El ser humano esta acostumbrado a dar lo que recibe, pero su madurez lo conduce a ser mejor cada día, a pensar en su prójimo, a ser autónomo y, de igual forma, a integrarse en la comunidad, velando por su bien propio y el bien común. La madurez sera, por tanto, aquello que nos ayuda a trascender y a decidir lo que nos conviene y lo que no, es una forma de alcanzar el verdadero carácter humano.

Las normas como un sentido de orden...


Son diversas las normas y leyes que rigen la sociedad actual, las cuales han sido implementadas desde el principio de los tiempos para mantener un orden en toda la sociedad y garantizar una buena forma de vida para todos. Desde mi punto de vista, considero que sin ellas el mundo sería un verdadero caos y las personas harían diferentes acciones que, ciertamente, son perjudiciales para los demás. Por lo anterior, las normas deben ser tenidas como una manera de evitar que lo perjudicial se multiplique en gran manera.

Esta imagen representa lo que ocurre cuando las normas no son tenidas en cuenta, incluso la contaminación del planeta es una de las consecuencias.

Sin embargo, actualmente se han implementado ciertas normas que no son de agrado general y debería realizarse una revisión de estas, para evitar que los dirigentes plasmen leyes que cumplen con algunas de las normas ya establecidas, pero infringen otras que tienen igual importancia para todos. Cabe mencionar que, seguir las normas es una forma de obedecer a Dios pues el mismo las ha creado, así como se expresa en Romanos 13:1-2: "Sométase toda persona a las autoridades superiores; porque no hay autoridad sino de parte de Dios, y las que hay, por Dios han sido establecidas. De modo que quien se opone a la autoridad, a lo establecido por Dios resiste; y los que resisten, acarrean condenación para sí mismos"; pero muchas de las normas actuales se han desviado de la dirección hecha por Dios y estas solo atentan contra los principios éticos y morales que son propios de todas las personas, incluso Dios ya no es el pilar fundamental que rige a la nación, aunque finjan creerle y seguirle.

Dios espera de nosotros grandes cosas, incluso respetar a las autoridades y dar ejemplo al prójimo.

Solo queda decir que las normas, por ejemplo aquellas que apoyan el aborto, necesitan un cambio en el cual se busque la guía de Dios y, de esta forma, sea posible un orden de mayor relevancia, asegurando un futuro de amor, paz, equidad y verdadera justicia, procurando en todo momento actuar de buena manera para lograr dicho objetivo y demostrarle al mundo que creer en Dios y amarle, es una de las mayores bendiciones que podemos tener, lo cual nos permite hacer de este un Lugar Mejor.

viernes, 19 de mayo de 2017

La alteridad: ser el otro...


“No se olviden de hacer el bien y compartir con otros lo que tienen, porque esos son los sacrificios que agradan a Dios” Hebreos 13:16.

Podemos definir la alteridad como: el obrar bien y permitiendo la vida del otro, en base de la práctica de la justicia y de la equidad en favor del prójimo.

Esta imagen es un claro ejemplo de lo que debemos evitar, si no queremos que sea de igual forma para nosotros.

Si bien, la alteridad abarca virtudes, que nos permiten manejar nuestra manera de ser o actuar ante ciertas situaciones, la prudencia aplica  muy bien en el sentido de la alteridad, en respetar los sentimientos y la vida del prójimo. Un individuo con conductas imprudentes es probable que no sólo ponga en riesgo su propia existencia, sino que también represente un peligro para la vida de otros. Esto ocurre con quienes conducen de manera temeraria, tienen animales peligroso en su hogar o festejan disparando al aire, entre muchas otras acciones y conductas que se oponen a la prudencia.

miércoles, 17 de mayo de 2017

Soy libre...odio las normas! Pero...

Haciendo alusión al título, y viéndolo desde un punto de vista moral, puedo llegar a decir que las primeras normas son las que me hicieron ver mis padres, pero a la vez siendo libre de decidir qué era lo mejor para mí y siendo responsable de mis propios actos. Después de esa etapa, viene el colegio, en el cual también se rigen un conjunto de normas de convivencia y se le cataloga como la primera vivienda de la vida pública, esto genera unos referentes fundamentales que nos van a acompañar a lo largo de toda la vida y tienen que ver con la formación del carácter, con la posibilidad de confianza en su capacidad de aprendizaje, en el conocimiento y establecer un corpus cultural. Efectivamente, el colegio es un espacio de socialización, en donde básicamente transmitimos nuestra cultura.


Las normas han sido inculcadas desde un principio.

Haciendo una reflexión de lo dicho, nuestra conducta está basada en un sistema de valores y se genera, principalmente, por la acción de los padres, los cuales son los encargados de transmitir los valores a la nueva generaciones. Ellos tienen la mejor oportunidad para hacerlo, dado que pueden influir sobre la persona en sus años infantiles, cuando carece de la capacidad de criticar. La capacidad de criticar solamente puede aparecer cuando, la persona ha reunido una suficiente cantidad de experiencias como para poder efectuar comparaciones. Los niños carecen de esto y, por lo tanto, tienen que aceptar como bueno todo lo que le transmiten sus padres, dicha transmisión es verbal y no verbal, está dada por palabras, gestos, actitudes y por la simple presencia de los padres tal como son.

miércoles, 10 de mayo de 2017

¡Soy libre! ¡Odio las Normas! Pero...

...esta sociedad las requiere para mantener el orden


Las normas están hechas para mantener una buena convivencia y armonía entre todos los individuos, son necesarias para mantener el orden, la estabilidad social, el bien común, ejercer autoridad y hacer valer derechos y deberes, sin embargo, en ocasiones terminan siendo una imposición que nadie quiere cumplir, dado que encasillan en esquemas sociales y no permiten un libre desarrollo. 


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Las normas deben permitir la libertad de expresión y desarrollo de las personas, no convertirse en un sistema que obligue e imponga conductas, siempre y cuando estas no perjudiquen a otros. Si bien no todas cumplen con este ideal, debemos ser conscientes de su importancia y función dentro de la sociedad y antes de quebrantar una norma o ley debemos preguntarnos: 

¿Cómo me afecta a mi o a otros infringir la ley?

domingo, 7 de mayo de 2017

La alteridad


La real academia de la lengua española, define la alteridad en cuatro palabras: 

"Condición de ser otro."

Pero, ¿qué implica esto?, ¿qué significado tiene?, y ¿como se aplica a la vida cotidiana? Para responder estas preguntas podemos remitirnos a la biblia, a un mandamiento dado en Mateo 22:39 y Gálatas 5:14.

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Mateo 22:39; Gálatas 5:14.

Ahora bien, según Enrique Dussel, alteridad consiste en "Estar en la condición del otro", significa entenderlo, comprenderlo, ayudarlo, ponerse en sus zapatos, sentir lo que la otra persona siente. Lo anterior implica salir de nuestro mundo y mirar las necesidades, razones, pensamientos, ideas, etc., del otro. En nuestro diario vivir lo aplicamos dejando de pensar solo en el bienestar propio, de manera egoísta, y procurar el bienestar colectivo.  

Esto lo logramos amando al prójimo (al otro), así como lo expresa la palabra de Dios, como si fuéramos nosotros mismos, es la única manera de practicarlo, es decir, haciendo con el otro lo que nos gustaría que hicieran con nosotros, tratando al otro como te gustaría ser tratado. Antes de juzgar una determinada acción, lo correcto es ponerse en la condición del otro e intentar entender sus razones, motivaciones o ideas. Antes de buscar mi bienestar lo correcto es ponerse en la condición del otro, procurando su bienestar, también, o no perjudicándole. Con acciones tan sencillas como estás se propician relaciones más pacíficas.